Estas son las 4 enfermedades más comunes que se dan en los perros Dóberman
El criador de caninos Jesús Hernández da a conocer algunas de las afecciones médicas hereditarias que más frecuentan los perros de raza Dóberman

Estas son las 4 enfermedades más comunes que se dan en los perros Dóberman - ShutterStock
El Dóberman es una raza de perro de origen alemán que se caracteriza por tener un cuerpo compacto y musculoso que refleja un porte elegante y poderoso, suele apreciarse en color negro brillante, azul, rojo o leonado, con marcas de tonalidad similar al óxido. De acuerdo con American Kennel Club (AKC), este magnífico animal es intrépido y vigilante, lo que lo convierte en uno de los mejores perros de protección del mundo. Sin embargo, dentro de su salud, existen diversas afecciones hereditarias, es por ello que te damos a conocer las 4 enfermedades más comunes que se dan en los perros Dóberman, según Jesús Hernández, criador de cachorros de la Federación Canófila Mexicana (FCM), una institución dedicada al adiestramiento canino.
También te puede interesar: ¿Cuánto ejercicio necesita un perro Dóberman al día?, esto dicen los expertos
Enfermedades comunes en los perros Dóberman
De acuerdo con el especialista de la FCM, estas son algunas de las enfermedades de origen genético que son más frecuentes y causan gran impacto en los perros de raza Dóberman:
- Síndrome de Wobbler. También conocida como espondilomielopatía cervical, es una enfermedad neurológica degenerativa, es decir, que empeora con el tiempo. Consiste en el desplazamiento anormal de los discos intervertebrales que viene acompañado de una malformación vertebral, crecimiento del ligamento dorsal y artrosis, una afección que destruye los cartílagos de las articulaciones. Su diagnóstico se puede realizar mediante radiografías convencionales, mielografía, tomografía y resonancias magnéticas. Síntomas: dolor cervical, tambaleo al caminar, cojera marcada en las patas traseras, ataxia (falta de coordinación) y paresia (falta de fuerza en los músculos). El tratamiento varía dependiendo de lo avanzada que esté la enfermedad, mediante múltiples modalidades, como: aplicación de analgésicos, antiinflamatorios, condroprotectores (alimentos complementarios), cirugías en la columna, hasta la aplicación de células madre, entre otras.
- Enfermedad de Von Willebrand. Es un trastorno de coagulación hereditario que también se presenta en personas. En esta se presenta una deficiencia del factor coagulante que sirve para llevar a cabo una coagulación adecuada en tiempo y forma. Síntomas: hemorragias en las fosas nasales y en las encías, aparición de tumores, sangrado vaginal excesivo durante el celo o parto, heces y orina con sangre, todas sin causa aparente.
El diagnóstico de esta afección puede hacerse mediante un perfil hemostático completo. El tratamiento de esta enfermedad sólo ayuda a controlarla, no a curarla, para ello el veterinario podría hacer uso de medios hemostráticos o recetar el uso de diferentes medicamentos.
También te puede interesar: 6 recomendaciones para que un perro Dóberman se mantenga sano y fuerte
- Cataratas. Es la opacidad del cristalino, que normalmente es blanco grisáceo, y se produce debido a una alteración en el metabolismo, puede afectar una parte o por completo la catarata focal (cristalino) del ojo. Síntomas: cambio de color u opacidad en uno o ambos ojos. Estas pueden ser de origen hereditario, traumático, metabólico, postuveítica y senil. Para su diagnóstico se requiere una revisión detallada y meticulosa con el oftalmoloscopio o lámpara de hendidura portátil en los ojos del perro por un médico veterinario. El tratamiento consiste en la extracción del cristalino y la implantación de un lente intraocular siempre y cuando el animal aún tenga el sentido de la vista.
- Displasia de cadera canina. Enfermedad hereditaria que se genera por factores genéticos y/o ambientales. Los perros la comienzan a tener cuando crecen y se debe a una inestabilidad o falta de ajuste en la articulación de la cadera llamada laxitud, la cual se desarrolla en exceso y causa una pérdida de congruencia entre la cabeza femoral y parte de la pelvis, provocándoles anomalías. Es una afección degenerativa articular que presenta síntomas como inflamación y dolor en las articulaciones. Su diagnóstico es clínico y necesita apoyo de imagenología para determinar el grado de displasia y del dueño del perro para una correcta y detallada anamnesis donde se explique el tipo de dolor desde el comienzo de los signos. El tratamiento puede ser de diversos modos, ya sea para controlar la degeneración articular o moderar los síntomas. Se han utilizado células madre, cirugía, prótesis de cadera y escisión artroplástica femoral para tratar o controlarla. Cabe señalar que esta enfermedad puede aparecer en cualquier perro sin importar su raza.